Septiembre

Le damos la bienvenida a este mes tan esperado cada año.
Un mes lleno de sentimientos a veces enfrentados porque viene repleto de nuevos proyectos y comienzos; cargado de alegría e ilusión. Por otro lado, deja atrás el disfrute del verano y sus vacaciones. Mes que en ocasiones también porta temores e incertidumbre ante lo nuevo.
Para todos, grandes y pequeños, resulta un mes especial porque en él se produce un cambio de estación también.

Cambios, cambios y más cambios es la peculiaridad de este mes.
Además es uno de los meses más complicados del año para las familias desde el punto de vista económico.
Es el momento de la vuelta al cole con todos los gastos que eso conlleva. Según la OCU el gasto medio por familia e hijo es de 500€ destinado a ropa, matrículas, libros, material escolar y actividades extraescolares y deportivas.

En muchos casos para los adultos, septiembre también supone un gasto extra, después de los excesos del verano se plantean comenzar en el gimnasio. También llega el momento de contratar suscripciones futbolísticas.
Para muchos es el momento del pago de impuestos, IBI, declaraciones de la renta si salió a pagar y se fraccionó, recibos de seguros.
Ahora toca prepararse para el frío. Incluso hasta hacer la compra de alimentos supone un desembolso extra si coincide con el final de vacaciones fuera de casa.

No desesperes porque que existen modos para llevarlo mejor y volver a la rutina económicamente hablando.

El mayor gasto es la vuelta al cole y en el que más se puede ahorrar, se trata únicamente de ser previsor y resolverlo antes de irte de vacaciones. Puedes contactar con los padres del próximo curso al que vaya a comenzar tu hijo para hacer intercambio de los libros e incluso de ropa. También puedes dejar abonado matrícula, uniforme y libros antes despedir el curso. Infórmate de las becas existentes y la posibilidad de contratar clases extraescolares online que abaratan a las presenciales.
En cuanto al material, seguro que pueden comenzar aprovechando parte de cursos anteriores. No es necesario estrenar todo al mismo tiempo. Las rebajas de verano son fantásticas para encontrar verdaderas gangas y además, serán parte del recuerdo de las vacaciones.

Es importante no hacer gastos superfluos y asegurarte que realmente es necesario, seguramente alguna de las suscripciones televisivas que te ofrecen puede esperar hasta que llegue más el frío y no te apetezca salir a la calle. Lo mismo que la matrícula y la mensualidad del gimnasio, todavía quedan algunas semanas de buen tiempo para aprovechar y hacer caminatas, salidas en bici o subir la escalera de la oficina en lugar de tomar el ascensor.
Reducir el consumo de helados, dulces y snacks te ayudarán en recuperar tu figura y mantener mejor tu bolsillo. No olvides que con respecto a los alimentos frescos, lo mejor es hacer compra de temporada.

En las compañías de seguros existen productos de ahorro que te permiten hacer rescates parciales y puedes darles forma para utilizarlos en esos momentos de más necesidad como el pago de impuestos, recibos de autos, hogar y vida.
Habrá recibos que te interese fraccionar para abonarlo cómodamente durante todo el año y otros recibos en los que obtendrás descuentos por elegir pago total o adelantado.

Realmente es más sencillo de lo que parece únicamente se trata de ser previsor y organizarse.